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Poema dedicado a los participantes del Cto. de España juvenil 1981

         Poema de Francesc Boqueras i Llort, 26 de julio de 1981 ("dedicado a todos los participantes del XXI Campeonato de España juvenil, celebrado en Reus").

 

EL AJEDREZ

1

Es un juego soberano

con muchos siglos de vida,

que quien lo puso a medida

sería un dios, no un humano.

Pues si a éste no es en vano

que le exige un intelecto

de lo más fino y perfecto

para jugar al Ajedrez,

quien lo inventara, pardiez,

sería un "plus-quam-perfecto".

5

El caballo o caballito,

es un ente saltarín

que persigue (este es su fin),

incordiar a un proscrito.

Su salto leve, inaudito,

puede resultar mortal

para todo aquel rival

que descuida las defensas,

y deja a sus expensas

al personaje real.

2

Dicho está que es soberano

porque tiene "reina" y "rey",

y una numerosa grey

y un ambiente castellano.

Los "alfiles", que en cristiano

traduzco por caballeros,

que montan "potros" señeros

en sus "torres" o castillos,

actuando de monaguillos

los "peones" o guerreros.

6

Vertical y horizontal

es la ruta de la TORRE,

que segura y firme corre

sin un quiebro lateral.

Con la misión esencial

de defender, sobre todo,

(o procurar acomodo

tranquilo y quieto a su rey);

misión que es norma y es ley

para todos, codo a codo.

3

Es la REINA dama y dueña

de la plaza blanca y negra:

si quiere la desintegra

o hace aquello que se empeña.

Es poderosa y risueña

para los de su color

que protege con ardor,

como a su real esposo.

No sabe lo que es reposo,

y a veces muere de amor.

7

Ahora vienen los PEONES,

que son quienes abren la brecha

arriba, izquierda o derecha,

aunque con limitaciones.

En algunas ocasiones

sirven también de reclamo

o para tapiar un trampa

que requiera protección;

y es su gloria y ambición

morir defendiendo al amo.

4

Son discretos los ALFILES

y monocolor su ruta;

poca cosa les inmuta

y son, de sí, muy gentiles.

Hay quien los juzga serviles

o demasiado dispuestos,

si interpretamos sus gestos,

en un exceso, galantes.

¿Son caballeros andantes

cual Quijotes, en sus puestos?

8

El REY, calmoso e indolente,

goza de prerrogativas:

todas las acometidas

hay que hacérselas presente.

Más si el astuto oponente

después de un serio combate

dice que le ha puesto en jaque,

ni realeza ni corona

salvarán a su persona

si además le dice: Mate.

 

 

Un puzzle al que le faltan piezas

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